Viaje a Paris: Musée de l'Armée ( 2º Parte )

Como os comentaba ayer, después de mi cabreo por que faltaban la mayoria de las piezas que quería ver, y después que no supieran aclararme que cañones eran de la batalla de Austerlitz, y con un bajón de mil pares, decidí darme una pausa y salí del museo, y me fui hacia la capilla donde se encuentra la tumba de Napoleón.

Nada mas entrar, a mano derecha tienes el control de entradas, y dando unos pasos, tienes un mirador, desde el cual ves la tumba.

En este lugar no solo reside el emperador, sino también su hijo, su hermano José, y se encuentran (o así era) los restos de muchos de sus mariscales.

Digo, así era, porque no pude confirmarlo, la verdad, pues el lugar donde residían sus nichos, tenía un cordón, y era imposible acercarse a leer quien estaba allí.

Y por cierto, quien estaba allí también enterrado, era el héroe de la primera guerra mundial: Foch.

Una tumba, muy bonita, la verdad, con mucho sentido, su féretro, es transportado por unos ¨poilus¨

En la parte de atrás, de la capilla, están las escaleras que dan acceso a la parte inferior y desde donde puedes ver mejor el féretro de Napoleón, y la tumba del Aguilucho (apodo que se dio a su hijo)

Una vez finalizada mi visita, al salir, y tras unos minutos de reflexión, pensé que ya que lo había pagado, terminaría de ver la sala que me quedaba.

Me volví a dirigir al museo, y entre en la sala dedicada en las dos guerras mundiales, como os dije en el anterior post, estas no me interesaban mucho, pues estoy cansado de ver pollos, y estrellas de la ww2.

Y de la primera con ver algunos detalles de uniformes me valía, por lo que mi visita por estas salas, fue bastante ágil, parándome solo cuando la foto lo merecía, pero ni siquiera me puse leer las indicaciones.

Tras recorrer las salas dedicadas a los mayores conflictos del siglo pasado, volvimos al punto de inicio, en la entrada, aprovechando que mi novia iba al baño, me acerque al punto de información, y exclame mi desacuerdo con que la sala de emblemas estuviese cerrada, y la falta de piezas, pues si lo hubiera sabido, me hubiera planteado el perder 4 horas en el museo.

La chica, sin levantar la mirada de su ordenador, me dice, con aire de prepotente:
- En nuestro folleto, queda bien claro, que algunas salas se cerraran para reforma y conservación.

En ese momento, pensé: mierda! A que me toca tragarme mis palabras...

Y me dispuse a leerlo y efectivamente, había una nota, en dicho folleto:
¨ Por motivos de conservación, algunas salas permaneceran cerradas, volviendo a ser abiertas, en primavera de 2009 ¨

Lo releo 2 veces, y le exclamo:

- Si, señorita, pero estamos en el 2010! Hace casi un año, que debería estar abierta!
- A lo que ella, me replica: Si, bueno, pero ya sabe que son piezas muy delicadas, que requieren un trabajo muy cuidadoso...

- Si yo lo comprendo, pero yo vengo desde España, y uno de mis paradas en mi viaje era este museo, y concretamente, admirar esas piezas.

- Bueno, siento las molestias causadas, nosotros siempre intentamos renovar nuestras salas, para ofrecer a los visitantes una mejor oferta;
De hecho, acabamos de inaugura una exposición de Charles de Gaulle, que seguro...

La interrumpo;
- Si, he visto el cartel de dicha exposición, y no me interesa, de hecho, ni me he molestado entrar, les dejo para los franceses, y su chovinismo esas cosas, pero no estoy de acuerdo con ustedes, y no volveré mas a este museo.

Me gire, y me puse a ojear mi reloj, hasta que salió mi novia del baño, hicimos una visita una visita rápida a la tienda de souvenirs, por si veía alguna pijada para traer a casa, pero como estaba de mala ostia, decepcionado, y cabreado, no me salió de los mismísimos hacer gasto allí.

Además, lo que vendían eran cosas que puedes encontrar fácilmente en otros sitios:
Libros, los mismos que hay en cualquier librería francesa, pins de la 101 y 82 aerotransportadas, el famoso ¨grillo¨ del Día D.

Luego los típicos recuerdos, como bolis, lápices y tazas del museo del ejercito. Etc.

Por lo que no quise comprar nada, y me fui de allí.

Así que chicos, si queréis ir alguna vez, y tenéis idea de ver alguna pieza en especial, preguntad, por que la decepción que te llevas es enorme.

El próximo relato, será sobre el arco del triunfo.

Saludos!